Los expertos recuerdan que el helado es un alimento que puede incluirse en cualquier alimentación equilibrada ya que aporta gran número de nutrientes necesarios para el organismo.
Dependiendo de la naturaleza y tipología de cada helado, éste puede aportar distintos nutrientes. Así, los sorbetes y helados de agua, gracias a su aporte de agua y temperatura, nos refrescan ayudándonos a mantener la hidratación; los sorbetes dado su mayor contenido en fruta, nos ayudan a aumentar el consumo de fruta de una forma deliciosa refrescante y divertida.
En cuanto a los helados de base láctea son una alternativa a valorar para completar la ingesta de lácteos en aquellas personas que, por hábitos o gustos, no llegan a consumir las cantidades diarias recomendadas.
A su vez, es destacable el compromiso del sector con la salud de los más pequeños, ajustando el perfil nutricional de sus productos, con el objetivo de reducir la cantidad de energía que contienen los helados por ración, convirtiéndolo en un postre más saludable y recomendable.
12 de junio de 2013
El sector confía en el atractivo del cartel de productos actual y en un repunte de las temperaturas para dinamizar así el consumo de helados, desfavorecido por la climatología